Cáncer de testículo
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Signos y síntomas al diagnóstico
La gran mayoría de los tumores germinales del varón se diagnostican porque el paciente se palpa un bulto en el testículo, que con frecuencia no duele. En los casos en los que existe dolor, suele aparecer progresivamente, aunque puede hacerlo de forma repentina si el tumor se complica con una infección (orquiepididimitis) o si sangra. En general los pacientes describen más una sensación de peso en el área genital o simplemente un aumento de tamaño del testículo.
En casos mucho más raros, estos tumores pueden ocasionar un crecimiento de las mamas en varones (ginecomastia) por el aumento de la Beta-Gonadotropina Coriónica (β-HCG), una hormona que se produce durante el embarazo y que solo aumenta en varones con ciertos tipos de tumores testiculares. En algunos pacientes puede existir dolor de espalda o de abdomen, causado porque los estímulos dolorosos del testículo se dirigen hacia ese lugar, o bien porque existan metástasis (extensiones del tumor de testículo a otras zonas) en ganglios linfáticos de la parte más posterior del abdomen (retroperitoneo).
Por último, en los casos en los que existen metástasis en otros órganos (por ejemplo en el pulmón, cerebro, hueso, etc.), éstas pueden producir síntomas muy variados (falta de aire, inestabilidad, dolor, etc.), dependiendo de su localización.