Simposium Educacional 13: Nuevas estrategias en el tratamiento de cáncer de próstata avanzado resistente a la castración

Dr. Albert Font, Hospital Universitario Germans Trias i Pujol, Instituto Catalán de Oncología.

En los últimos años el tratamiento del cáncer de próstata resistente a castración (CPRC) ha experimentado importantes avances gracias al mejor conocimiento del papel que desempeñan las alteraciones en la vía del receptor androgénico (RA) en la progresión del CPRC y, especialmente, por el desarrollo de nuevas terapias activas. En esta sesión se han presentado diferentes estudios en los que se evidencia la actividad de los nuevos tratamientos en pacientes con CPRC tratados previamente con docetaxel. Cabazitaxel es un nuevo taxano que ha demostrado una mejoría significativa en la supervivencia mediana (15.1 vs 12.7 meses con una HR de 0.7) y a 2 años (28% vs 17%) respecto a la combinación de mitoxantrone/prednisona con un perfil de toxicidad aceptable con un correcto manejo según el perfil de los pacientes. En el estudio COU-AA-301 acetato de abiraterona , un inhibidor selectivo de la biosíntesis de andrógenos, ha demostrado un incremento de 4.6 meses en la supervivencia mediana con una disminución en el riesgo de muerte del 26% respecto a placebo, con un buen perfil de toxicidad. En este estudio se aportan datos sobre posibles factores pronósticos, predictivos e indicadores de la magnitud del beneficio como son ECOG, dolor, número de líneas y respuesta al tratamiento previo, niveles hormonales basales y recuento de CTC basales y tras el tratamiento. Recientemente, enzalutamida un nuevo inhibidor del RA ha demostrado también un aumento significativo en la supervivencia tras tratamiento con docetaxel. Asimismo nuevas terapias hormonales con novedosos mecanismos de acción están actualmente en fase de desarrollo con resultados prometedores. También los tratamientos con una acción directa sobre el hueso, como el Radium-223, han demostrado en pacientes con metástasis óseas sintomáticas un beneficio en la supervivencia y en el retraso en la aparición de eventos relacionados con el esqueleto.

Ante esta plétora de nuevos tratamientos activos en el CPRC se nos plantean nuevos retos. El estudio de las vías genéticas implicadas en la activación del RA puede resultar fundamental para conocer los mecanismos de resistencia de los tratamientos oncológicos en el CPRC y, por tanto, poder establecer la mejor secuencia y el potencial beneficio de diferentes combinaciones. En el futuro, resultará prioritario el desarrollo de nuevos marcadores moleculares predictivos, tanto en tejido tumoral como en CTC, que nos permitan personalizar el tratamiento oncológico en los pacientes con CPRC.